Ayudamos a crear, gestionar y evaluar programas, experiencias y recursos de aprendizaje significativo.

El aprendizaje está en todas partes. Ya sea en una conversación, un paseo en el parque, una visita a un museo o un curso en línea.

Sin embargo, con intención y un buen diseño, estas simples actividades pueden convertirse en experiencias educativas transformadoras.

Nos especializamos en crear experiencias, programas y recursos educativos a través de procesos de diseño, coordinación y evaluación intencionados para lograr aprendizajes significativos y que duren toda la vida.

Nuestra misión es ampliar la comprensión de las personas sobre lo que puede ser la educación y demostrar que cualquier experiencia, cuando está guiada por una mentalidad de abundancia y respaldada por las estrategias, herramientas y procesos adecuados, tiene el potencial de ser un viaje de aprendizaje transformador para todos los involucrados.

Nuestros Principios

Nuestro abordaje se basa en los siguientes principios sobre el aprendizaje y la educación.

Son los paradigmas que guían nuestro trabajo:

  • Reconocemos que el aprendizaje es un proceso que ocurre constantemente, seamos conscientes de ello o no. Creemos que cualquier espacio, situación o condición ofrece una oportunidad interesante para aprender.

  • Creemos en que todos tenemos valiosos fondos de conocimiento que nos permiten contribuir al proceso de aprendizaje de otras personas. También creemos que los seres no humanos pueden ser maestros, como los animales, las plantas y la naturaleza en su conjunto.

  • Los sistemas educativos tradicionales nos hacen ver el aprendizaje como un camino recto y predecible o como una trayectoria progresiva hacia un mayor conocimiento. Entendemos el aprendizaje como un proceso no lineal en el cual el conocimiento y las transformaciones de pensamiento pueden surgir de fuentes inesperadas e impredecibles. También reconocemos que “des-aprender” y “re-aprender” son procesos naturales y necesarios.

  • Todos somos aprendices, desde el día en que nacemos hasta nuestro último día en la Tierra. Adoptar una mentalidad de “aprendiz” en cada etapa de nuestra vida nos permite mantenernos curiosos, observadores y flexibles.